El Futuro de la Doble Vía en Termas del Daymán / ¿Un Riesgo para el Parque Flora Nativa?
El desarrollo vial es clave para mejorar la conectividad y el turismo, pero cuando una obra impacta en un espacio natural y patrimonial, surgen dudas y preocupaciones. Este es el caso de la doble vía proyectada en Termas del Daymán, en Salto, Uruguay, una iniciativa del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) que podría afectar al Parque Flora Nativa «Rumbo al Ayuí», un santuario ecológico con casi 20 años de historia. Para conocer más sobre esta situación, En una entrevista con el ingeniero agrónomo Wilson González, ideólogo del Parque, quien compartió detalles sobre su origen, su importancia y los riesgos que enfrenta ante el avance de esta infraestructura.
Un Parque con Identidad Histórica y Ecológica
Ubicado sobre la avenida Wilson Ferreira Aldunate, el parque fue concebido en 2006 como un espacio que combina conservación ambiental y memoria histórica. Su diseño representa el Éxodo del Pueblo Oriental de 1811, con árboles plantados de manera simbólica para reflejar la marcha de Artigas y sus seguidores.
El sentido del parque se basa en una representación viva del éxodo, donde cada árbol plantado simboliza a los protagonistas de esta gesta. Entre las especies más destacadas se encuentran: Ibirápitá: Representa a José Gervasio Artigas, líder del éxodo. Su presencia al norte del parque marca el rumbo de la marcha, guiando a su pueblo. Ceibos: Simbolizan a los Blandengues, el cuerpo militar que acompañó y protegió a los orientales en su travesía. Timbó: Representa al cacique indígena Ansina, fiel seguidor de Artigas, conocido por su lealtad y por ser el encargado de transmitir los mensajes del líder oriental. Molle: En honor a Bartolomé Hidalgo, poeta del movimiento artiguista y autor de la «Marcha Oriental», himno oficial del departamento de Salto. Cada una de estas especies no solo cumple un rol simbólico, sino que además contribuye a la preservación de la flora autóctona. En total, el parque cuenta con más de 100 árboles de 60 especies distintas, consolidándose como un refugio de biodiversidad.
El Proyecto de la Doble Vía y su Impacto
La nueva doble vía entre Termas del Daymán y la ciudad de Salto es una obra que busca mejorar el acceso a la región y optimizar la circulación vehicular en una zona de alto tránsito turístico. Sin embargo, su trazado aún no está completamente definido, lo que genera incertidumbre sobre su posible impacto en el Parque Flora Nativa.
Según el ingeniero Wilson González, el proyecto podría amenazar la integridad del área, dependiendo de cómo se diseñe la ampliación. En su entrevista , destacó que una de sus principales preocupaciones es que se realicen modificaciones que destruyan parte del ecosistema, ya sea por la eliminación de árboles o por cambios en el manejo del suelo y la vegetación.
Otro punto de debate es la preservación del valor histórico del parque. Al estar ubicado en un punto de alto tránsito, cualquier alteración en su estructura podría afectar la representación del Éxodo Oriental, perdiendo un espacio que ha servido como herramienta educativa para cientos de visitantes y estudiantes.
¿Es Posible un Equilibrio entre Infraestructura y Medio Ambiente?
Si bien la construcción de la doble vía es una necesidad para mejorar la conectividad, los defensores del parque insisten en que debe existir un equilibrio. Alternativas como el desvío del trazado o la implementación de medidas de mitigación podrían ayudar a conservar el espacio sin frenar el desarrollo vial.
Además, se plantea la posibilidad de integrar el parque dentro del proyecto de la doble vía, promoviendo su reconocimiento como un sitio de interés turístico y patrimonial. Esto permitiría fortalecer su conservación y fomentar su inclusión en las rutas turísticas de la región.
El futuro del Parque Flora Nativa «Rumbo al Ayuí» depende de las decisiones que se tomen en torno a la doble vía de Termas del Daymán. Es fundamental que el desarrollo vial no atente contra la biodiversidad ni contra la memoria histórica de la ciudad.
El desafío está en encontrar soluciones que permitan mejorar la infraestructura sin perder espacios naturales clave. La comunidad, junto con las autoridades, tiene la responsabilidad de velar por un crecimiento urbano sostenible, en el que historia, naturaleza y progreso puedan convivir en armonía.